México se prepara ante la "emergencia Trump", como ha definido el Gobierno de Enrique Peña Nieto la previsible candidatura republicana de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, vista como una amenaza para los analistas y el sector empresarial.

"Ahí hay triángulo de análisis del Gobierno mexicano para saber cómo enfrentar lo que llamaríamos la emergencia Trump", dijo el subsecretario de Población, Migración y Asuntos Migratorios de la Secretaría de Gobernación, Humberto Roque.

Roque es la única autoridad en pronunciarse hasta ahora sobre la retirada de todos los rivales republicanos del magnate Donald Trump, que el miércoles quedó como el único elegible para ser candidato de ese partido a la Casa Blanca, lo que ha desatado, todavía más, las alarmas en México.

El funcionario se mostró preocupado ante la "amenaza" de una posible victoria a la presidencia de Trump, que defiende la deportación de EE.UU. de más de 11 millones de indocumentados y la construcción de un muro en su frontera sur para bloquear la inmigración clandestina.

El Gobierno mexicano nombró este abril al experimentado diplomático Carlos Sada como embajador en Washington, a Paulo Carreño como subsecretario para América del Norte y a Carlos Pérez Verdía, que dejó ese último cargo, como coordinador de asesores de Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Además, busca reforzar su papel en Estados Unidos, su principal socio comercial.

Prueba de ello es la visita que realiza esta semana la canciller Claudia Ruiz Massieu a California, donde refirió a la necesidad de "reposicionar" la imagen de México en el país norteamericano y recordó "las valiosas" contribuciones de los migrantes mexicanos allí.

Los partidos políticos también mostraron su rechazo a Trump. El coordinador se senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Miguel Barbosa, habló de "peligro para el mundo" ante una futura llegada a la Casa Blanca del magnate.

La presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores para América Latina y el Caribe del Senado, Mariana Gómez del Campo, del conservador Partido Acción Nacional (PAN), deseó que los latinos no dieran "un solo voto" a Trump.

El Consejo Mexicano de Negocios (CMN) también se mostró preocupado y alegaron que el discurso del aspirante atenta contra el Tratado de Libre Comercio (TLCAN), y de materializarse afectaría al comercio y a la inversión.

"No deja de ser preocupante un candidato como Trump, que ha sido tan virulento contra México, contra los migrantes mexicanos y que ha descalificado al TLCAN", señaló el presidente de la CMN, Alejandro Ramírez, quien calificó al magnate de "demagógico y populista".

El canciller de México entre 2000 y 2003 Jorge Castañeda afirmó en su columna de este jueves en el diario Milenio que Trump tiene "posibilidades reales de ganar" por la "pasión" que ha generado entre sus seguidores.

"Ojalá ahora sí las élites mexicanas, empresariales, políticas, intelectuales y diplomáticas despierten", advirtió.

El gobernador del norteño estado de Nuevo León, Jaime Rodríguez "el Bronco", dijo en una reunión con empresarios que Trump ganaría la presidencia y comparó el ascenso del magnate con el suyo propio, que el año pasado hizo historia contra todo pronóstico al ser el primer candidato independiente en ganar una gobernación.

Asimismo, el exmandatario mexicano Vicente Fox (2000-2006) se disculpó ante Trump por el lenguaje "vulgar" que utilizó en febrero para hablar de los planes del republicano para construir un muro, y lo invitó a visitar México.

EFE